-
1930-1976
El Estado tuvo el rol de ser el impulsor clave de la industrialización y creó una serie de empresas públicas que acompañaron el desarrollo industrial, por ejemplo YPF. También impulso la ampliación del mercado interno y el aumento de la demanda de bienes industriales. El estado acompaño el crecimiento de la “clase media” con planes de promoción industrial y crédito para empresas, creación de universidades y escuelas técnicas, y organismos oficiales. -
1976-1983
Gracias al golpe militar, el sector manufacturero local perdió más de 20.000 establecimientos, lo que provoco que cayera un 20% el producto bruto del sector, la ocupación disminuyo un 40% y el peso relativo de la producción manufacturera en el conjunto de la economía se redujo un 28%. Algunas ramas productivas pudieron escapar a este proceso mientras que otras se beneficiaron, y las PYMES fueron las menos favorecidas, fueron absorbidas por el estado. -
Decada de 1980
La concentración económica fue en las ramas de bienes de uso intermedio (celulosa y papel, cemento, entre otras). Aunque contaban con la ayuda estatal, no hubo inversión por parte de los empresarios, Sin embargo algunas grandes empresas lograron exportar sus productos. Los grupos empresarios favoritos por la dictadura militar siguieron acumulando capital y obteniendo los mismos beneficios. -
1991-1995
La concentración de la propiedad industrial estuvo asociada con una expansión de las empresas líderes -
1993-1998
Se consolido un tipo de industria asociada a la expansión de los recursos naturales, como la producción de alimentos y bebidas, y los sectores asociados al poder. También en desempeño del sector industrial estuvo ligado a la desintegración de la producción fabril. -
1995-1998
Se relacionaron con los cambios de propiedad centrados en la extranjerización del sector. Durante esta etapa el plan de privatizaciones de empresas públicas tuvo como principales beneficiarios a los mismos grupos empresarios que habían sido favorecidos en las décadas anteriores. De esta manera nuevos operadores transnacionales y bancos extranjeros invirtieron en distintos sectores de la economía nacional.