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Fundación del instituto mexicano del seguro social: Inicio de un sistema para dar cobertura a trabajadores, marcando un antes y después en la salud pública
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Se crea el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado: Este amplió el acceso a salud a empleados del gobierno, mejorando equidad en la atención.
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No solo se reconoció la salud como derecho en la Constitución (art. 4º), sino que también se promulgó la Ley General de Salud y se estructuró formalmente el Sistema Nacional de Salud: Este momento es clave porque estableció las bases legales y organizativas para todo lo que vino después en políticas, instituciones y programas de calidad en los servicios de salud.
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Nace la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios: Ha sido importante para vigilar medicamentos, vacunas y alimentos, elevando estándares de calidad.
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Se estableció este organismo dentro de la Secretaría de Salud: Importante porque coordina la mejora continua de la calidad y evalúa servicios médicos.
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Surge para dar cobertura a personas sin seguridad social: Amplió la atención a millones de mexicanos, aunque con críticas en su implementación.
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Nace norma oficial sobre el expediente clínico: Un paso importante para estandarizar la documentación médica y la calidad de la atención.
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Se impulsa la calidad en la atención con enfoque en seguridad del paciente: Introdujo la idea de medir indicadores y trabajar bajo evidencia.
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Se empezaron a aplicar metas como identificación correcta del paciente, seguridad en la medicación, etc: Fue un paso clave para alinear México con estándares internacionales.
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Norma para prevenir riesgos psicosociales en el trabajo (incluido personal de salud): Indirectamente mejora la calidad en salud, porque reconoce el bienestar laboral como parte del servicio de calidad.