Fundamentación normativa de la educación inclusiva desde la diversidad y principios éticos de la interacción humana

  • Convención sobre los Derechos del Niño

    Se llega al acuerdo que todos los derechos deben ser aplicados a todas las niñas y niños sin excepción alguna y es obligación de los estados tomar las medidas que sean necesarias para proteger a sus niños y niñas de cualquier tipo de discriminación.
  • Conferencia Mundial sobre Educación para Todos

    Se hace la recordación explicita de prestar especial atención a las necesidades básicas de aprendizaje de todas las personas y tomar las medidas necesarias para garantizar su acceso a la educación como parte integrante del servicio educativo.
  • Conferencia Mundial de Derechos

    En esta conferencia se establece la ampliación del concepto de universalidad de los Derechos Humanos.
  • La Declaración de Managua

    Establece: “Para asegurar el bienestar social para todas las personas, las sociedades se tienen que basar en la justicia, igualdad, equidad, integración e interdependencia, y reconocer y aceptar la diversidad. Las sociedades deben también considerar a sus miembros por encima de todo, como personas y asegurar su dignidad, derechos, autodeterminación, acceso total a los recursos sociales y la oportunidad de contribuir a la vida comunitaria”.
  • Normas uniformes de la Naciones Unidas sobre igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad

    Buscan garantizar que estas personas puedan tener los mismos derechos y responsabilidades que los demás.
  • Conferencia Mundial sobre Necesidades Educativas Especiales: Acceso y Calidad

    El principio formulado en el Marco de Acción de Salamanca señala que “las Instituciones Educativas deben acoger a todos los niños, niñas y jóvenes, independiente de sus condiciones personales e impulsar prácticas efectivas para combatir actitudes discriminatorias, crear comunidades abiertas, construir una sociedad integrada y lograr educación para todos” (artículo2de la Declaración).
  • Reunión de Ministros de Educación de América Latina y el Caribe

    Se recomienda fortalecer las condiciones y estrategias para que las Instituciones Educativas puedan atender a los estudiantes con necesidades educativas especiales o que presentan dificultades de aprendizaje debido a causas como la discapacidad, enseñanza o escolaridad inadecuadas y ambientes sociales marginados.
  • Reunión regional de las Américas preparatoria para el Foro Mundial de Educación para Todos

    Se establece el compromiso de formular políticas de educación inclusiva, priorizando en cada país a la población más excluida, y establecer marcos legales e institucionales que permitan hacer de la inclusión una responsabilidad colectiva.
  • Marco de Acción de Dakar Educación para Todos: Cumplir nuestros compromisos comunes

    Este marco establece que la inclusión de los niños con necesidades especiales o pertenecientes a minorías étnicas desfavorecidas, poblaciones migrantes, comunidades remotas y asiladas o tugurios urbanos, así como de otros excluidos de la educación, deberá ser parte integrante de las estrategias para lograr la Educación para Todos antes del año 2015.
  • VII Reunión Regional de Ministros de Educación

    Se hace explícito el reconocimiento de la diversidad y la interculturalidad como factor de enriquecimiento de los aprendizajes y se recomienda que los procesos pedagógicos tomen en cuenta las diferencias sociales, culturales, de género, de capacidad y de intereses, con el fin de favorecer los aprendizajes, la comprensión mutua y la convivencia armónica.
  • Declaración de educación para todos: Un asunto de derechos humanos

    El tema central es la educación de calidad para todos, entendida como un bien público y un derecho humano fundamental que los Estados tienen la obligación de respetar, promover y proteger, con el fin de asegurar la igualdad de oportunidades en el acceso al conocimiento de toda la población.
  • Acta final IV jornadas de cooperación educativa con Iberoamérica sobre educación especial e inclusión educativa

    Concluye “que la inclusión, más allá de los marcos legales internacionales y nacionales, supone una responsabilidad ética que compromete a todo sistema educativo a situar en el centro de su quehacer la existencia de todas y cada una de las personas”.