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Diez días antes de sembrar, pon las papas en un lugar cálido donde reciban mucha luz, para que empiecen a salirles brotes.
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Una vez que los brotes están fuertes y duros, perfora en el cubo un hoyo para drenar y llénalo a dos terceras partes de su capacidad de composta o tierra.
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Coloca las papas-semillas dentro de esa tierra, con los brotes hacia arriba. Y después llena el cubo casi hasta el borde con más composta o tierra.
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Coloca el cubo sobre unos ladrillos para que pueda drenarse, en un lugar donde reciba una cantidad razonable de luz. La temperatura ideal es de 10° a 15°C.
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Para obtener papas más grandes, quítale a la planta todas las flores que le salen.
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Recojemos El Sembrado
