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Inauguración de la corriente transformista, estableciendo un sistema tributario encabezado por el impuesto a la renta de personas naturales y empresas. -
La Ley de Justicia Tributaria y Comercial fue la reforma establecer una política impositiva en consonancia con los principios de generalidad, neutralidad y equidad de los tributos, y de facilitación de las actividades económicas en el marco de la democracia económica y social. -
Trató de suplir el descenso de los ingresos tributarios causado por la tragedia del huracán Mitch, es necesario modificar el sistema tributario nicaragüense, con el fin de obtener los ingresos necesarios, para cubrir el déficit fiscal y garantizar un balance en el programa económico del país y poder alcanzar la condonación total de la deuda externa de Nicaragua. -
Esta Ley preservó la estructura del Impuesto sobre la Renta establecida por las dos anteriores administraciones, basado en el sistema de renta global y personal. En cambio, la segunda reforma tributaria, Ley de Equidad Fiscal, esta establecía una política impositiva acorde a la no creación de impuestos, redefinir y controlar las exenciones y exoneraciones en general y ampliar el universo de contribuyentes al Sistema Tributario. -
Se intentó hacer una reducir las exoneraciones y tratamientos especiales alcanzar una mayor eficiencia en la recaudación de todos los tributos, los recursos ordinarios asignados a la Dirección General de Ingresos y a la Dirección General de Servicios Aduaneros serán equivalentes al 3% de la recaudación bruta que logre cada institución. -
Aprobación del Código Tributario -
Al inicio de la gestión presidencial del comandante Daniel Ortega en 2007, es decir, mucho antes de la vigencia de la Ley de Concentración Tributaria que tuvo lugar a partir de 2013. En primer término, nuestra hipótesis de trabajo es que esta ley debe interpretarse como un proceso que despunta en 2007 y se extiende en el tiempo acompañado únicamente de promesas de cambios integrales en la fiscalidad nacional. -
Surgieron los primeros indicios de atención a un proyecto de reforma tributaria que, desde las postrimerías del gobierno Bolaños, venía gestándose con asesoría de organismos multilaterales. -
Se emite la reforma “insignia” la cual terminó de complicar el panorama de inestabilidad legislativa, a la vez que perpetuó las exoneraciones y afianzó el sistema cedular de tratamientos diferenciados, todo ello en detrimento de la equidad. -
Inequidad al sistema tributario. -
Los trabajadores nicaragüenses tenían que asumir un aporte del 6,25% a un 7 % sobre su salario. Por otro lado los empleadores deberán de pagar el 19% al 22,5 % de los salarios de sus trabajadores y, los jubilados tendrían que aportar un 5% del monto que reciben como pensión de retiro. -
Es necesario asegurar los ingresos tributarios para continuar el fortalecimiento de la estabilidad fiscal y macroeconómica para avanzar hacia el crecimiento económico, la generación de empleo y el mantenimiento de los programas sociales para la reducción de la pobreza.