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Nací en Puebla a las 7:58 am un sábado. Era un día soleado y mis papás estaban muy felices de mi llegada.
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Era la primera vez que estaba consciente de que ya no iba a ver a mi mamá por un par de horas y lloré cuando la vi irse.
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Ese día estaba emocionada pero a la vez muy nerviosa. En ese entonces creía que la primaria sería el reto más difícil que iba a tener, pero no sabía lo que iba a pasarme despues.
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La vez que iba a enfrentarme a mi religión, me acuerdo que toda mi familia estaba emocionada y que después de la misa iba a haber una fiesta con mis amigos.
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Un día antes dentro de la escuela hubo una pijamada, era toda la generación reunida en la escuela y en la noche. Al siguiente día nos vimos todos en la graduación y sin duda fue un gran día
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Entré a la secundaria, estaba muy emocionada en ese momento me sentía grande y quería hacer todo lo que se me ocurriera.
Pero lo más importante fue que descubrí mi pasión por el baile. -
El año que marcó muchas cosas en mi vida. Ese año ha sido el mejor para mí, me hizo madurar y ahí descubrí a mi primer amor.
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Sin duda la fiesta que más recuerdo, fue muy lindo todo lo que prepararon para nosotros y todos los premios que recibí por mi esfuerzo en esa maravillosa etapa de mi vida. Extraño mucho a los amigos que se fueron a otra preparatoria.
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El inicio de mi última etapa escolar. Nuevos amigos, muchas más experiencias, momentos inolvidables y sin duda ha sido la etapa en la que más emociones he encontrado.
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Ese día entendí que ya faltaba poco para la mayoría de edad, y que tenía que empezar a ser consiente de que ya no era una niña, tenía que empezar a hacer todo por mi cuenta o al menos lo que estuviera al alcance de mis manos pero sin perder la diversión.