Leyenda

Leyenda: El conejo plasmado en la luna

  • Period: 1325 to 1521

    Civilización pueblo Azteca

    Los aztecas o mexicas fueron un pueblo nahua que, entre 1325 y 1521, conformaron una civilización expansionista en el Valle de México. Su desarrollo corresponde al período Posclásico tardío de acuerdo con la periodización tradicional de Mesoamérica. La civilización azteca finalizó a causa de la conquista de América cuando su capital, la ciudad de Tenochtitlán, cayó en manos del conquistador español Hernán Cortés, el 12 de agosto de 1521.
  • La Transformación del Dios Quetzalcóatl
    1330

    La Transformación del Dios Quetzalcóatl

    El Dios Quetzalcóatl dejó su aspecto de serpiente emplumada para transformarse en un hombre común y así poder explorar la Tierra.
  • En la exploración de la Tierra
    1350

    En la exploración de la Tierra

    El dios se encontraba tan maravillado con los hermosos paisajes que siguió caminando hasta que el cielo se oscureció y se llenó de estrellas. Cansado y hambriento, se detuvo al lado del camino.
  • Un conejo se encuentra con el Dios
    1375

    Un conejo se encuentra con el Dios

    Un conejo pasó por su lado y le preguntó: —¿Estás bien? —No, me siento muy cansado y hambriento —respondió el dios. Sin saber que estaba hablando con una deidad, el conejo rápidamente se ofreció a compartir su comida con Quetzalcóatl. —Gracias, pero no como plantas — le dijo el dios al conejo
  • La bondad del conejo
    1400

    La bondad del conejo

    El pequeño animal sintió mucha pena por el viajero: —No tengo nada más que ofrecerte, soy una criatura insignificante y tú necesitas recuperar tus fuerzas, por favor cómeme y reanuda tu viaje.
  • El reconocimiento del Dios Quetzalcóatl
    1450

    El reconocimiento del Dios Quetzalcóatl

    El dios conmovido por el noble gesto de la pequeña criatura, regresó a su forma de serpiente emplumada y sostuvo al conejo tan alto que su reflejo quedó plasmado para siempre en la luna. Luego, regresó al conejo a la Tierra y dijo: —No eres una insignificante criatura, tu retrato pintado en la luz de la luna contará a todos los hombres la historia de tu bondad.