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De los mosaicos romanos que conservamos actualmente este es uno de los más espectaculares.
este conjunto de teselas plasma la batalla entre Alejandro Magno y el rey persa Darío I. La escena destaca por el tratamiento de la perspectiva y la sensación de agitación y movimiento. Sus figuras están modeladas por sombreados y los caballos presentan un marcado escorzo. Los colores predominantes son de tonalidades cálidas.
Se conserva en el Museo de Nápoles. -
Busto del periodo republicano realista, natural y sin idealización ninguna. Se ha interpretado como un retrato de Catón.
El gusto romano por el realismo es consecuencia de la tradición y el prestigio que daba perpetuar y apelar a los antepasados y sus “gestas”, de ahí que se desarrollara tanto el retrato, pero no de forma canónica e idealizada como en Grecia, sino de manera muy realista, expresiva e individualizadora como vemos con este ejemplo. -
La pintura romana recibía influencias griegas y etruscas. Se hallaba subordinada a la arquitectura como decoración. Las pinturas están realizadas sobre las paredes del triclinium por lo que su finalidad principal es la de embellecer la estancia.
Resaltan por su característico realismo y detallismo.
En estas pinturas de estilo arquitectónico se ha interpretado la representación de la iniciación de una mujer en los ritos de culto a Dionisio. -
Fue uno de los primeros edificios permanentes de la ciudad de Roma, y el primer edificio de la ciudad construido en mármol.
El teatro se coronaba con un templo dedicado a Venus Victoriosa, deidad personal de Pompeyo.
La cávea contaba con 150 metros de diámetro, y en su zona central se situaba una escalinata semicircular que ascendía al templo situado en la parte superior. Tras el frente de escena de 90 metros se situaba un gran peristilo de columnas de granito que rodeaba el jardín -
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Este templo se levantó en honor al emperador Augusto y estaba dedicado a los dioses de Roma y a los nietos del emperador.
Fue elaborado con piedra caliza y se trata de un templo hexástilo y pseudodíptero en el que podemos encontrar columnas de orden corintio que sostienen un entablamento completo. Sobre este último hay un frontón triangular y un tejado a dos aguas. Se accede a él mediante la escalinata de la fachada principal. Su atrio es columnado y la cella carece de opistodomo. -
Esta estatua, de bulto redondo, es una de las pocas esculturas en bronce que se conserva de la época romana. Se elaboró siguiendo la técnica de cera perdida y constituye una obra honorífica y propagandística.
En ella se aprecia un carácter dual marcado por la paz y tranquilidad que desprende Marco Aurelio y la agresividad del caballo, además del realismo que perseguían los retratos en la época del alto Imperio. Está dotada de gran movimiento. Su autor continua siendo desconocido. -
La estatua de bulto redondo perteneciente al estilo del alto imperio se laboró con mármol blanco de la isla de Paros.
Se cree que formaba un conjunto con estatuas de Venus y Mercurio.
Podemos reconocer a la diosa por sus atributos: las botas altas , el quitón y la diadema de media luna. Hay un elemento perdido: el carcaj, recipiente para guardar las flechas. Sabemos de su existencia porque se puede intuir la correa que lo sostenía. La acompaña un cervato. -
Las termas tuvieron un papel importante dentro de la vida cotidiana de los ciudadanos romanos. No solo servían para mantener una buena higiene de la población si no que se convirtieron en lugares de reunión.
La gran capacidad de bañistas que podían albergar estas termas obligaron a construir un ramal especial desde "Aqua Marcia".
Están hechas de hormigón revestido de mármol y estuco, y se cubrieron con grandes bóvedas y cúpulas sobre pechinas. En su interior había pinturas y mosaicos. -
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El campo del mosaico, creado con teselas con la técnica "opus tesellatum" se divide en una zona con decoración de cuadros formados por triángulos blancos y negros contrapuestos y otra, formada por doce cuadros que representan los trabajos de Hércules dispuestos alrededor de una escena central en la que se representa a Hércules y Ónfale.
La narración comienza con la hazaña del estrangulamiento del León de Nemea. El emblema central representa el mito de Hércules y Ónfale. -
Nos encontramos ante una parte de la que fue la escultura de Constantino. La cabeza goza de gran tamaño y esta tallada bajo la influencia del estilo típico de finales del Imperio Romano denominado período hierático. Cumple con el sentido anticlásico que se perseguía en este periodo. Se intenta plasmar al emperador como un dios y es casi del todo cierto afirmar que nos encontramos ante una muestra de poder y riqueza en toda evidencia.
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La basílica era el edificio en el que se administraba justicia y se realizaban tratos comerciales. La basílica de Majencio se erigió sobre las ruinas del Templo de la Paz de Vespasiano.
Está construida a base de ladrillo y hormigón. El acceso era mediante el nártex y contaba con tres naves además de grandes ventanales, capillas y ábside. -
Los arcos de triunfo surgieron como creaciones arquitectónicas conmemorativas, concretamente de grandes victorias del Imperio. Este arco conmemora la victoria del Puente Milvio sobre Majencio.
Presenta una compleja y rica decoración escultórica en la que el significado toma mayor importancia que la forma, dejando atrás su influencia griega. Está realizado con mármol en su mayoría. Es un claro ejemplo de la transición hacia el estilo medieval.