-
Prepararnos para entablar una conversación.
-
Mantener contacto visual.
-
Mantener un lenguaje corporal acorde a la conversación.
-
Mantener una actitud imparcial (estar preparado para tocar cualquier tema).
-
Conocer el lenguaje no verbal de la persona para comprender algunos factores que no se perciben fácilmente a través de las palabras.
-
Transmitir a la persona o personas a las que nos estamos dirigiendo que les estamos prestando atención con respuestas asertivas, negativas, con expresiones faciales, etc.
-
Ser claros y tener seguridad en las respuestas.