Dos entidades federativas, Zacatecas y Coahuila-Texas, se opusieron a un decreto legislativo que limitaba el número de milicianos que podían tener los estados.
Los generales Gabriel Valencia, Mariano Paredes y Antonio López de Santa Anna se reunieron en Tacubaya con el objetivo de derrocar a Anastasio Bustamante y desconocer el gobierno centralista.
Un grupo de conservadores, encabezado por el general Félix María Zuloaga, proclamo el plan de Tacubaya, que condenaba la constitución y convocaba a un congreso constituyente.
Los gobiernos de Inglaterra, España y Francia, principales acreedores de México, se reunieron en Londres para convenir medidas extraordinarias a tomar frente a la suspensión de pagos promulgada por el presidente Juárez.