Tema 1 del paleolítico a los visigodos

Homo Antecessor y Heidelbergensis

200,000 BCE

(Fecha real 800.000 años)
Sus restos se encontraron en el yacimiento de la Gran Dolina, en la Sierra de Atapuerca, Burgos.
Su supervivencia se basaba en la caza, la pesca y la recolección de frutos.
Eran nómadas, es decir, no tenían una residencia fija si no que se iban desplazando según las circustancias.

Homo Neandertal

199,999 BCE

(Fecha real 230.000 años)
Habitó en Europa, Próximo Oriente, Oriente Medio y Asia Central.
Tenían una anatomía más robusta que el humano actual, con tórax y cadera anchos y extremidades cortas. Existe la posibilidad de que tuvieran algún tipo de lenguaje.
Subsistían a base de la caza y la recolección.
Sus herramientas consistían en objetos como hachas de mano, tajadores, rasadores, cuchillos y puntas de lanza.

Homo Sapiens

40,000 BCE

(Fecha real 315.000 años)
Sus restos más antiguos se hallaron en Marruecos.
Llegaron a la Península Ibérica hace 44.000 años.
Es la especie anterior a la nuestra, por lo tanto compartimos muchas características, como el lenguaje articulado.
Sus cuerpos eran menos robustos y con menos vello en el cuerpo.
Además, sus herramientas eran más sofisticadas.

Arte Rupestre Cantábrico

35,000 BCE

Se trata de un arte en el que destacan las figuras de animales, como bisontes, ciervos, jabalíes, etc.
Están pintados con una técnica realista.
Las escenas se hallan superpuestas y los colores predominantes son el negro, para los contornos, y toda una gama de ocres para el relleno. Además, aprovechaban el relieve de las cuevas para crear volumen y profundidad.
Una de las mejores representaciones del arte paleolítico en el mundo es la cueva de Altamira, en Cantabria.

Arte Rupestre levantino

10,000 BCE

En ella se representan escenas de cacerías, danzas y recolección dónde predomina las figuras humanas.
Sólo hacen uso del negro y el rojo, ya que son pinturas monocromáticas y las formas tienden a la esquematización.

Neolítico

5000 BCE

La primera fase se desarrolló alrededor del Mediterráneo.
En este periodo nuestros antepasados empezaron a producir alimentos, lo cual fomentó el sendentarismo y las primeras comunidades estables (poblados), por la necesidad de atender los cultivos y el ganado.
Los asentamientos eran fundamentalmente en cuevas, dónde se han hallado restos de cerámica y los primeros utensilios, relacionados con los trabajos agrícolas.
En la segunda fase, estas comunidades empezaron a situarse en los llanos.

Edad del Cobre

3000 BCE

Introducción de un nuevo avance tecnológico: la metalurgia del cobre.
Se desarrolló el megalitismo, que consistía en tumbas colectivas elaboradas con grandes piedras. Destacan los megalitos de Extremadura y Andalucía.
Otros avances tecnológicos fueron los sistemas de riego, el abono de los campos y la introducción del arado. Estos avances fomentaron la agricultura y, por lo tanto, la sedentarización.
Empezaron a construir poblados amurrallados (ya habían conflictos entre pueblos).

Edad del Bronce

2200 BCE

A partir aproximadamente del 2.200 a.C se produce el paso de la matalurgia del cobre a la del bronce.
Aparece un nuevo tipo de cerámica en forma de campana invertida, llamada vaso campaniforme. Esta se extendió por toda Europa y se relaciona con el comercio del metal.
Hacia el 1.700 a.C se desarrolla la cultura de El Argar, en Almería. Su principal característica es que incineraban a sus muertos y los conservaban tanto en pequeños recipientes, como en tinajas, como en grandes ajuares funerarios.

Celtas

1100 BCE

Los pueblos Celtas procedían de Centroeuropa.
La sociedad estaba organizada en clanes, estos se unían con clanes de otros poblados, formando tribus.
Su economía se basaba en la ganadería y en la fabricación de objetos de hierro y de bronce.
Las creencias religiosas consistían en la adoración de elementos de la naturaleza y en la incineración de los cadáveres, cuyas cenizas guardaban en urnas de cerámica.
Desconocían la escritura y sus manifestaciones artísticas fueron escasas.

Tartessos

1000 BCE

Su eje principal de influencia se situó en el triángulo Huelva-Sevilla-Cádiz, aunque también se extendió por Andalucía y el sur de Extremadura.
La base de su subsistencia era la agricultura y el comercio de metales con los griegos y los fenicios.
Era una sociedad jerárquica, dominada por una aristocracia que controlaba el territorio, el comercio y la riqueza.
En el siglo VI a.C Tartessos desapareció por causas desconocidas, quizás por el agotamiento de sus minas o por la dominación cartaginesa.

Fenicios, griegos y cartagineses

800 BCE

Se establecieron en el sur de la Península, lugar rico en cobre plata y oro y estratégicamente situado en la ruta del estaño, allí fundaron rutas comerciales.
A finales del II milenio, los fenicios fundaron en la costa mediterránea sus primeras colonias, entre las que destaca Gadir
Los griegos desembarcaron la Península Ibérica hacia el siglo VIII a.C, fundaron Empoiron y Mainake
Los cartagineses se establecieron en el siglo VII en las Islas Baleares y fundaron colonias como Ebasus y Cartagonova

Íberos

700 BCE

Los pueblos Íberos estaban establecidos en el este y el sur de la Península Ibérica
La sociedad estaba encabezada por reyes o jefes
Su economía se basaba en la agricultura, la ganadería, la metalurgia, la artesanía y el comercio con los griegos y cartagineses.
Las creencias religiosas adoración de un dios guerrero y una diosa de la fertilidad.
Los muertos se incineraban y sus cenizas se guardaban en urnas de cerámica
Tenían su propia escritura y realizaron abundantes manifestaciones artísticas.

Fase Conquista Romanos

218 BCE

Segunda fase: consistió en la conquista de la meseta y terminó a finales del siglo II a.C.
Hubo dos casos significativos:
Los lusitanios; pudieron frenar el avance de las legiones romanas gracias a la táctica de las guerrillas. Finalmente la muerte traición de su caudillo Viriato acabó con la guerra.
La ciudad celtíbera de Numancia; opuso a una gran resistencia pero finalmente fue vencida en el año 133 a.C

Fase Conquista Romanos

218 BCE

Tercera fase: Augusto ocupó la zona cantábrica entre el 29 y el 19 a.C. La protección de las montañas y el carácter belico de sus pobladores dificultaron la conquista, sin embargo, una vez lograda, Roma se convirtió en dueña de la totalidad del territorio peninsular.

Fases Conquista Romanos

218 BCE

Primera fase: entre el 218 y el 206 a.C se produjo la Segunda Guerra Púnica, la victoria de esta guerra supuso para los romanos la adquisición del sur y el levante peninsular.

Romanización

217 BCE

La presencia romana introdujo en Hispania sus elementos culturales y su estructura social y económica, a este proceso de imposición se le conoce como romanización.
La lengua latina se difundió por todo el imperio y se impuso a la mayoría de las lenguas autóctonas.
Se extendió el uso del derecho romano que regulaba tanto las relaciones privadas como las instituciones políticas y su funcionamiento.
El culto a los dioses romanos fue practicado por todo el Imperio así como el culto imperial.

Economía Romana

217 BCE

La agricultura fue la base de la economía hispanorromana, siendo el trigo, la vid y el olivo los principales productos cultivados. Se adoptaron inovaciones técnicas romanas.
En la minería se introdujeron nuevas técnicas e Hispania aportó muchos minerales a Roma.
La artesanía producía tejidos, cerámica, vidrio, productos de hierro, aceite, vinos y salazón de pescado.
El comercio se basó en la exportación de trigo, aceites, salazones y metales, y en la importación de artículos de lujo.

Organización Administrativa Roma

197 BCE

Hubo tres divisiones de la Península Ibérica.
División republicana: se establecieron dos provincias, la Hispania Citerior y la Hispania Ulterior. (197 a.C)
División de Augusto: se instauraron tres provincias, la Bética con capital en Corduba, la Tarraconense con capital en Tarraco y la Lusitania con capital en Emerita Augusta. (27-14 a.C)
División de Diocleciano: a partir de la Tarraconense surgieron la provincia Cartaginense y la Gallaecia. Más adelante se creó la provincia Balearica. (297 a.C)

Crisis Imperio Romano

476

Se produjo una disminución de los ingresos del Estado y un encarecimiento de la mano de obra esclava, la cual era esencial en su sistema económico.
El comercio y el artesanado frenaron, las ciudades empezaron a despoblarse y el Imperio se vio sin recursos para gobernar un territorio tan extenso.
Además, las fronteras comenzaron a verse presionadas por los pueblos bárbaros, que finalmente ocuparon Roma en el 476.
Tras la caída de Roma, los visigodos formaron el Reino visigodo, capital Tolosa.

Visigodos

507

Los visigodos establecieron su reino independiente con capital en Toledo.
Los monarcas Leovigildo y su hijo Recaredo consiguieron dominar a los vascones, cántabros y astures, expulsaron a los suevos y conquistaron numerosos territorios bizantinos.
Los visigodos estructuraron una monarquía hereditaria y consiguieron la unificación religiosa y jurídica.
Las rivalidades entre Witiza y Rodrigo, facilitaron la invasión de la Península por un ejército de bereberes procedentes del norte de África.