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Durante toda la vida se han usado los dedos índice y corazón para saber nuestra frecuencia cardiaca. Así, se colocaban en el cuello, la muñeca o el corazón y se contaban los latidos durante un minuto.
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En un entrenamiento en una pista de esquí de fondo de Finlandia, surgió la idea de crear un monitor de ritmo cardíaco portátil e inalámbrico.
La empresa finlandesa POLAR presentó su primera patente para la medición de la frecuencia cardíaca y en 1982 lanzó el primer monitor portátil de ritmo cardíaco al mercado. -
Este primer modelo evolucionó y se creó el primer pulsómetro con interfaz informática integrada, que permitió a los usuarios ver y analizar sus datos de entrenamiento por primera vez en un ordenador.
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Se empiezan a combinar las mediciones de velocidad y distancia con el ritmo cardíaco.
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Surge Garmin en EEUU que lanza sus primeros modelos para el deporte. Tanto en Garmin como en Polar la comunicación era unidireccional. Únicamente del reloj al ordenador para almacenar las sesiones de entrenamiento.
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Era un diario de entrenamiento en línea gratis, donde los usuarios podían transferir de forma inalámbrica los datos de entrenamiento y así realizar un seguimiento de su progreso
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Se incorporó el GPS y el sistema de transmisión ANT+ que permite la interconexión de dispositivos sin cable de distintos fabricantes.
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Por primera vez la comunicación entre el reloj y el ordenador será BIDIRECCIONAL (el ordenador, además de receptor de la información, también es emisor de información al reloj).
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La característica principal es la capacidad de detectar automáticamente el cambio de un deporte a otro, adaptando los datos visualizados en pantalla en función del deporte que se practica.
Además, se añade la medición de la frecuencia cardíaca mediante sensor óptico con luces LEDs integrado en la correa del reloj, prescindiendo de la banda pectoral.