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Su infancia
Su infancia estuvo marcada por sus problemas físicos desde bien pequeña. Tuvo polio en 1913 lo que le postró en una cama durante nueves meses y dejó de forma permanente su pierna derecha más delgada que la izquierda. La polio fue el comienzo de una serie de enfermedades y operaciones que la llevaba a estar fuera de la escuela sola, lo que forjó su carácter solitario. -
La relación con su madre
La relación con su madre nunca fue buena, en cambio con su padre siempre tuvo una conexión muy fuerte. Su padre sufría ataques epilépticos y Frida sabía qué hacer cuando ocurrían y lograba calmarlos. -
¿Donde estudio?
En 1922 con 15 años ingresó en la Escuela Nacional Preparatoria de México, uno de los mejores centros de todo el país. Allí hizo amistades con las futuras figuras intelectuales como Salvador Novo o Carmen Jaime. Fundó el grupo de los Cachuchas, definiéndose como rebeldes, críticos con la autoridad y las injusticias. A ellos les dedicó en 1927 un cuadro. -
El matrimonio con Diego Rivera
Frida Kahlo frecuentaba mucho el taller de Diego Rivera ansiosa por ver su trabajo y también por mostrarle los cuadros que iba haciendo cada vez en mayor número. El 21 de agosto de 1929 se casó con Diego Rivera, separándose 10 años más tarde, y volviéndose a casarse un año más tarde. Este segundo matrimonio fue con un contrato previo en el que cual se estipulaba que vivirían juntos, compartirían gastos, continuarían colaborando artísticamente y no habría sexo entre ellos. -
Su accidente
n 1925 sufrió el accidente que cambiaría y marcaría su vida por completo. Frida Kahlo iba en un autobús cuando un tranvía chocó contra él aplastándolo contra un muro. La consecuencia de este accidente fue triple fractura de la columna vertebral, dos costillas fracturadas, hueso pélvico, pierna, pie y clavícula también rotas. Además, una barra de hierro le atravesó desde la cadera hasta la vagina. Este accidente forjaría su carácter de sufrimiento que luego plasmaría en su obra. -
Su obra
La soledad y el sufrimiento son el eje fundamental de su obra. La inspiración principal en sus pinturas fueron sus autorretratos transmitiendo la dureza de su alma. A pesar de enmarcar su obra en el surrealismo, Kahlo siempre negó tajantemente esta corriente en sus pinturas. El surrealismo tenía como característica la apariencia onírica y la simbología. Ella siempre defendió que no pintaba sueños, sino su realidad, una indagación en lo más profundo de su ser.