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• Los orígenes del concreto se remonta a 2 siglos A. de C., en Roma, cuando utilizaron mezclas de caliza calcinada, tobas volcánicas y piedras, para construir algunas de las estructuras que hoy todavía subsisten, como el panteón o la iglesia de Santa María de los Mártires.
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En el siglo 7 de nuestra era, con la caída del imperio Romano se olvidó su uso.
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En el siglo XVIII es re descubierto por los ingleses.