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Primordialmente, las danzas iniciales eran ritos de “transición de vida”, que servían para guiar a una persona moribunda hacia el más allá.
En las zonas norteñas y en las áreas desérticas era común la realización de bailes en ritos funerarios. Por otro lado, en Centroamérica e incluso más hacia el norte era tradicional realizar ritos y bailes al momento de cazar o ir a la guerra. -
Entre las más importantes que se presentan están: la danza de la conquista, la danza de la malinche, la del marqués y la danza de los aztecas, que se representan como una tragedia de la destrucción de la civilización indígena a manos de los conquistadores españoles
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Los bailes eran en la España del siglo XVIII diversión predilecta en todas las clases sociales y en la alta sociedad las de origen francés.
Con el siglo XVIII se abre un período de mayor refinamiento y amplitud en todos los campos de la cultura que llegaría a las colonias de ultramar.
La danza de salón se desarrolló en la época colonial bajo el signo de la danza de pareja suelta, ya independiente como en el Paspié, la Gavota o el Minué, ya de conjunto como en la Contradanza. -
La polka checoslovaca, la mazurca y redova polacas, el chotis escoces, las cuadrillas inglesas y el vals austriaco fueron traídos a México en calidad de bailes de salón por la cursi aristocracia de principios de 1800.
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Debido a que no se ha investigado este periodo de la danza mexicana, todo queda como hipótesis basada en la coincidencia de los títulos de algunas obras representadas en la ciudad de México en los años finales de la dominación española.
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Fueron muchos los géneros de baile que estaban de moda, casi todos importados de los salones europeos particularmente parisinos y vieneses, además del vals y la mazurca, se apreciaban el chotís, la polka, la polonesa, la escocesa, la varsoviana, el galop, la contradanza y la camelina (de los pocos estilos de factura local).
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La revolución mexicana que tumbo del poder al régimen porfirista en 1910 reformo todo aspecto social, económico y político e México que proveyó finalmente la posibilidad de una cultura híbrida y propia. La polka checoslovaca, la mazurca y redova polacas, el chotis escoces, las cuadrillas inglesas y el vals austriaco fueron traídos a México en calidad de bailes de salón
