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Retrato de Luis XIV (Hyacinthe Rigaud)
El rey Luis XIV fue uno de los más importantes monarcas de la época. Luis XIV encargó este cuadro, en principio, como regalo para este nieto suyo, Felipe V. Sin embargo, gustó tanto en la corte que nunca lo enviaron a España. La pintura fue mostrada en el salón de 1704, despertando la admiración del público de la época. -
La batalla de Almansa (Buonaventura Ligli y Filippo Pallotta)
La Batalla de Almansa es una e las más decisivas de la llamada Guerra de Sucesión Española abierta tras morir el rey Carlos II sin tener descendientes. -
Retrato de Felipe V ( Josep Amorós )
Felipe V le hizo cosas horribles a Xátiva, hasta le cambio en nombre y Xátiva no podia perdonarlo. El nombre de Xàtiva volvió con las Cortes de Cádiz, más de un siglo después, en 1812. Pero no fue hasta 1957 cuando la ciudad señaló al culpable de su ignominia. Ese año, según cuentan la mayoría de crónicas, el director del Museu de l'Almodí puso boca abajo el cuadro de Felipe V, un cuadro pintado por el artista local Josep Amorós en 1719 por encargo del gobierno local. -
Una reunión en casa de madame Geoffrin (Lemonnier)
Durante el siglo XVIII el salón se convirtio en un lugar de reunión de los intelectuales. Algunos de ellos alcanzaron tal fama que trascendio las fronteras de sus paises; esta es una de las causas de la rapidez con la que se expandieron las ideas ilustradas. El salón de Madame Geoffrin era uno de los mas importantes de Paris. En este cuadro, Lemonier retrata una de estas veladas. -
María Antonieta en traje de corte (Elisabeth Vigée-Lebrun)
Élisabeth tuvo su gran avance como retratista cuando fue llamada a Versalles para pintar un retrato de estado de la reina María Antonieta. María Antonieta estaba encantada y siguieron muchos más pedidos. Además, las dos mujeres de la misma edad pronto se hicieron amigas. -
Juramento del juego de la pelota ( Jacques-Louis David )
Los representantes del Tercer Estado se habían conjurado para llevar a cabo su tarea. Eligieron la sala de juego de pelota de Versalles. Allí Jean-Joseph Mounier y el abate Emmanuel-Joseph Sieyès tomaron una decisión que fue secundada por el resto: «De no separarse jamás, y reunirse siempre que las circunstancias lo exijan hasta que la constitución sea aprobada y consolidada sobre unas bases sólidas» -
La toma de la Bastilla ( Jean-Pierre Houe )
Tradicionalmente se ha considerado que la Revolución Francesa representó el fin de una era, el Antiguo Régimen, y el inicio de otra, la época moderna. El monarca, Luis XVI, estaba convencido de que reinaba sobre todos los franceses por derecho divino, y como monarca absoluto que era no tenía la obligación de rendir cuentas ante nadie, y mucho menos ante el pueblo. -
el golpe de Estado del 18 de Brumario ( François Bouchot )
Después de que la Austria controlada por los Habsburgo declarara la guerra a Francia el 12 de marzo de 1799, se adoptaron medidas de emergencia y la facción jacobina a favor de la guerra triunfó en las elecciones de abril. Con Napoleón y el mejor ejército de la república comprometidos en la campaña de Egipto y Siria , Francia sufrió una serie de reveses en el campo de batalla.