Conquista de las Islas Canarias.

  • 1312

    Motivaciones para la expansión.

    Motivaciones para la expansión.
    Las motivaciones fueron la expansión económica, el avance tecnológico en la náutica con el desarrollo de la brújula, el astrolabio... Por último la idea de cruzada religiosa del cristianismo frente al islam.
  • 1312

    La expansión Europea.

    La expansión Europea.
    Distintas expediciones comenzaron a merodear las islas siendo una de ellas la de Lanceloto Malocello que era un navegante genovés que llegó a Lanzarote en la década de los treinta del s. XIV, para
    permanecer aquí casi dos décadas. Esto mejoró el conocimiento y situación del archipiélago y animó a otros navegantes y exploradores a recalar en
    él. La mayoría de esas expediciones se realizaron para obtener esclavos, aunque algunas tuvieron un carácter evangelizador.
  • 1402

    La conquista señorial.

    La conquista señorial.
    La conquista señorial es la que se produce por iniciativa y financiación de individuos particulares, aunque bajo el reconocimiento de una corona. Por su parte, en la conquista realenga, es la propia Corona la que interviene y financia la campaña, con el fin de incorporar nuevos territorios y súbditos a sus dominios. La diferencia
    entre las dos modalidades de conquista marcará profundamente la vida de los habitantes de una isla señorial con respeto a otra de realengo.
  • 1402

    La conquista de Lanzarote.

    La conquista de Lanzarote.
    Bethencourt y La Salle salieron en mayo de 1402 rumbo a las Islas Canarias. Ese mismo año desembarcaron en Alegranza, para posteriormente hacerlo en la playa de Las Coloradas, o de Rubicón en Lanzarote.
    La invasión de la isla se inició desde el sur, ya que los indígenas estaban concentrados, sobre todo, en el norte y centro de la isla.
    Inicialmente los majos no presentaron resistencia. Bethencourt se reunió con el rey Guadarfía y acordaron que los naturales quedarían bajo su protección.
  • 1404

    La conquista de Fuerteventura.

    La conquista de Fuerteventura.
    En 1404 invadieron la isla de Fuerteventura por separado: uno estableció sus fortificaciones en Rico Roque, y el otro, en Val Tarajal. Los antiguos majoreros, capitaneados por sus dos jefes tribales, Guise y Ayose, resistieron hasta que la superioridad militar de losnormandos los obligó a rendirse y a ser bautizados por los franciscanos
    en 1405.
  • 1405

    La conquista del Hierro

    La conquista del Hierro
    Jean de Bethencourt desembarcó en 1405 en la isla sin encontrar oposición por parte de los antiguos herreños, muy diezmados por las capturas de esclavos que había sufrido la isla durante más de un siglo. Utilizando como intermediario a Ausegon, un indígena herreño capturado con anterioridad, el normando llegó a un acuerdo con los herreños, y tomó la isla sin oposición.
  • 1418

    La conquista señorial castellana

    La conquista señorial castellana
    Bethencourt dejó al cargo del señorío a su pariente Maciot de Bethencourt, hasta que este vendió sus dominios y derechos de conquista en 1418 a Enrique de Guzmán. Posteriormente, el señorío entraría en disputa, pasando primero a manos de Alfonso de Las Casas y sus descendientes, y finalmente a Hernán Peraza y a sus hijos Guillén e Inés. Al morir Guillén Peraza en La Palma, los derechos sobre las islas pasaron a Inés Peraza y a su marido Diego, convirtiéndose en 1477 en únicos señores de Canarias
  • 1477

    Tentativas en La Palma, Gran Canaria y Tenerife.

    En 1447, Guillén Peraza desembarcó en La Palma en busca de esclavos. Los palmeros del cantón de Tihuya, al mando del rey Echedey, los emboscaron, dando muerte al propio Guillén. En 1461 Diego de Herrera recibió el vasallaje momentáneo de los guanartemes de Gran Canaria, y en 1464 tomó posesión simbólica de Tenerife con el Acta del Bufadero. El mencey de Anaga le permitió levantar una torre en sus tierras, hasta que en 1472 fue demolida por los guanches.
  • 1478

    La conquista Realenga.

    La conquista Realenga.
    La segunda etapa de la conquista de las islas se caracteriza por el protagonismo de los Reyes Católicos, quienes dirigen y financian las campañas bélicas, junto a inversores particulares. Además, este periodo afecta a las tres islas más pobladas, Gran Canaria, Tenerife y La Palma, que tenían no solo más y mejores expectativas económicas, sino también unas poblaciones indígenas con mayor capacidad frente a cualquier intento de invasión.
  • 1478

    La conquista de Gran Canaria

    La conquista de Gran Canaria
    Juan Rejón desembarcó en La Isleta en 1478 y, junto al Guiniguada, levantó el Real de Las Palmas. Unos días después, se enfrentó a los canarios, consiguiendo la victoria que le permitiría controlar la esquina noreste de la isla. Sin embargo, Juan Rejón sería sustituido por Pedro del Algaba, aunque este último sería ejecutado por orden de su antecesor. En consecuencia, los Reyes Católicos ordenaron la detención de Rejón y pusieron en su lugar a un nuevo gobernador: Pedro de Vera.
  • 1479

    Los portugueses en Canarias.

    Los portugueses en Canarias.
    Querían controlar las rutas atlánticas y las Islas Canarias resultaban de especial interés. Enrique El Navegante intentó apoderarse del archipiélago, enviando varias expediciones sin éxito. Aún así, los portugueses llegaron a ocupar Lanzarote durante dos años, hasta que fueron expulsados por la población local. El Tratado de Alcaçovas de 1479 dejó a Portugal sin opciones sobre el archipiélago canario.
  • 1483

    Fernando Guanarteme

    Fernando Guanarteme
    Pedro de Vera reanudó la conquista militar hacia el guanartemato de Gáldar, con el apoyo de Alonso Fernández de Lugo y Hernán Peraza. Gracias a ellos consiguió capturar a Tenesor, guanarteme de Gáldar, y reducir la resistencia canaria. Semidán fue enviado a Castilla a conocer a los Reyes Católicos y bautizado como Fernando Guanarteme, convirtiéndose en un valioso aliado de los castellanos para terminar de someter a la isla. Finalmente, en 1483 Gran Canaria fue conquistada definitivamente.
  • 1488

    Incorporación de la Gomera

    El control de la isla siempre estuvo jalonado de revueltas por el incumplimiento de los acuerdos por parte de los señores de la isla. El principal alzamiento, denominado la Rebelión de los Gomeros, se produjo en 1488 y causó la muerte del propio Hernán Peraza. La represión castellana supuso la muerte y la esclavitud de centenares de gomeros y gomeras.
  • 1492

    Conquista de La Palma

    Conquista de La Palma
    Alonso Fernández de Lugo obtuvo de los Reyes Católicos los derechos de conquista de La Palma. El acuerdo incluía un quinto de los esclavos vendidos y setecientos mil maravedíes, si la conquista se completaba en menos de un año. Las fuerzas castellanas desembarcaron en Tazacorte en 1492. Gracias a los acuerdos con los jefes indígenas apenas hubo resistencia, salvo un episodio en Tigalate y, sobre todo, por la fuerte resistencia opuesta por el cantón de Aceró.
  • 1493

    Conquista de Tenerife.

    Conquista de Tenerife.
    Una vez doblegada la isla de La Palma, Alonso Fernández de Lugo puso su vista en Tenerife, para lo cual renunció en 1493 a la prima por conquistar La Palma en el plazo de un año, a cambio de los derechos de conquista de Tenerife. Con ese reconocimiento, la financiación obtenida de la venta de sus ingenios azucareros de Agaete y la inversión de mercaderes italianos, Lugo se preparó para desembarcar en Tenerife en abril de 1494.