-
Se abandonó el patrón bimetálico, que volvió las
relaciones mercantiles más rígidas e hizo más vulnerable a la economía nacional ante las oscilaciones en el mercado mundial del precio de los metales preciosos, además de desatar la
especulación cambiaria. En esos años la política económica tuvo un efecto procíclico que aceleró la tendencia decreciente de la producción. -
El poco dinamismo de industrias muy ligadas al
mercado norteamericano como la minería, la metalúrgica y, en general, la mayoría de las ramas
industriales, provocaron un descenso de 15% en la producción industrial nacional. -
Crisis agrícola a consecuencia de las sequías, lo que
elevó el precio de los principales productos alimenticios para el mercado interno. -
Este periodo se caracterizaron por una producción para la exportación que continuó creciendo (henequén), y una producción para consumo interno en descenso (maíz, frijol), y por una minería e industria manufacturera que mantuvo un comportamiento aceptable.
-
En este periodo se registró la crisis económica más profunda, pues prácticamente todas las ramas de la actividad industrial resultaron afectadas, a excepción del petróleo y el
henequén, a raíz del golpe de Estado de Victoriano Huerta (la famosa decena trágica del 9 al 18 de febrero de 1913) y el asesinato de Madero el día 22. -
Este periodo se caracterizó, en lo general, por la recuperación de la actividad económica por la vía primario-exportadora. La recuperación de la actividad económica se inició en 1917 una vez consolidado el nuevo régimen y promulgada la Constitución
que lo estructuró. La industria petrolera tuvo una “época dorada”. Al final de la primera guerra mundial, México aportaba 15.4% de la producción mundial alcanzando un máximo de 25.2% en 1921. -
Las políticas de reorganización de la economía, que con posterioridad serían el punto de arranque de la industrialización, dieron comienzo de manera precaria durante el régimen de Álvaro Obregón (1920-1924) y de Plutarco Elías Calles (1924-1928).
-
Refinanciamiento de la deuda externa mexicana por Alberto J. Pani, Secretario de Hacienda. Asimismo, se devolvieron los ferrocarriles a manos privadas e inició operaciones el Banco de
México. -
En un contexto político aún inestable, y quizá a causa de eso, la economía mexicana entró en crisis debido a la contracción de las exportaciones.
-
La agudización de conflictos como el religioso, el externo con Estados Unidos por el petróleo, el agrario, y el político-militar entre Plutarco Elías Calles.
-
El PIB per capita en pesos (-16.3% ) y en dólares (-22.5% en 1931 y -42.7% ); provocó dos años de severísima deflación (12.7% en 1931 y 10.8%), y contrajo el consumo 11.9%.
-
Las políticas públicas se orientaron a crear la infraestructura esencial de industrias básicas como la eléctrica, para la cual se creó en 1933 la Comisión Federal de Electricidad.
-
Se consolidó el nacionalismo económico, lo que provocó que la
concentración del poder estatal se apoyara cada vez más en organizaciones sociales como la Confederación Nacional Campesina CNC y la Confederación de Trabajadores de México
CTM. -
La segunda guerra mundial provocó una mayor demanda europea y norteamericana de bienes primarios y manufacturados producidos en los países periféricos, situación que condujo a un mayor crecimiento de las exportaciones mexicanas y que se prolongó hasta 1945.
-
La economía mexicana inició la etapa de crecimiento sostenido
que duraría hasta fines de los años sesenta. El PIB creció a una tasa promedio anual superior al 7.5por ciento. El crecimiento de la producción manufacturera modificó el perfil del aparato productivo en esos diez años, cuyo valor total de se duplicó durante la década. -
-
La inflación se incrementó, lo que redujo los salarios reales. Esta reducción en el poder de compra real quizá se vio
compensada por el aumento de la ocupación, la migración hacia las ciudades y los cambios a ocupaciones mejor remuneradas. -
México experimentó un periodo de crecimiento sostenido.
-
Durante este periodo, la tasa real de crecimiento del PIB alcanzó un promedio de 6.7% anual, la inflación, después de haber asimilado las repercusiones de la devaluación de 1954, descendió a un nivel promedio de 2.5% anual en los
años sesenta. -
-
El alto precio del petróleo y las grandes reservas del energético que tenía México provocaron que pudiera acceder a créditos en el mercado internacional, situación que explica que la deuda externa pasara de 8,990 millones de dólares.
-
Dos hechos surgidos bruscamente provocaron un auge inflacionario: por un lado, en 1971 se derrumbó el sistema de Bretton Woods por el abandono del patrón oro por parte de
los Estados Unidos, lo que dio lugar a la devaluación del dólar. -
A partir de ese año las devaluaciones sistemáticas no se detendrían tornando endémicas las altas tasas de inflación.
-
Este fenómeno de un menor crecimiento acompañado de una inflación creciente (pasó de 6.8% en 1972 a 31.2% en 1977) fue una tendencia que afectó prácticamente a la totalidad de los países del mundo capitalista.
-
La política monetaria restrictiva aplicada por el Tesoro de Estados Unidos fortaleció al dólar y elevó las tasas de interés (en dólares), por lo que el pago de los intereses de la deuda se volvieron impagables, motivo por el cual se declaró la
moratoria de la deuda en 1982. -
Inicio de una nueva etapa con la instrumentación de un nuevo modelo o paradigma llamado neoliberalismo que pondría fin a la fuerte intervención del Estado en algunas actividades económicas.
-
Época Neoliberal (1982-2010)
-
Pactos Económicos que a partir de 1987 lograron reducir y estabilizar la inflación que pasó de un histórico 150% a un 7% en 1994, hasta que la devaluación de diciembre de 1994 y la posterior crisis económica echaron por tierra todo el edificio económico que resultó que estaba apuntalado con alfileres.
-
Apertura externa se coronó con la firma y entrada en
vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994. -
La devaluación de 1994 tuvo tres elementos detonantes: un creciente déficit en cuenta corriente, los lamentables asesinatos políticos de 1994 y la información privilegiada a la que
tuvieron acceso algunos empresarios que vaciaron las reservas internacionales ante el inminente ajuste cambiario. Esa crisis sólo pudo ser superada gracias al rescate financiero del FMI y del
Gobierno de Estados Unidos por 25 mil millones de dólares. -
La estabilidad económica no es garantía de desarrollo y crecimiento económico. El desarrollo económico y el incremento de los niveles de bienestar material de la mayoría de la población mexicana es el gran fracaso de la
política económica, y de toda la política en general.